domingo, 6 de julio de 2014

¿Por qué no respondes?

¿Estas ahí? ¿Puedes oírme? ¿Por qué no respondes?

Ya ni siquiera estoy seguro de que estés al otro lado, apenas se si oigo tu respiración o solo me la imagino, y tu risa, esa carcajada tuya, se me hace tan real…

En ocasiones, cuando bajo la cabeza y cierro los ojos siento que me susurras algo, rápidamente me vuelvo miro hacia todas partes y no veo nada, tu voz se aleja con el viento y vuelvo a verme solo en mitad de la calle. Entonces camino más deprisa, con impotencia, con fuerza, con rabia, cada vez más rápido, hasta verme corriendo como una liebre que escucha disparos.

No pienso parar, hasta que tropiezo y caigo de rodillas. Cierro mis puños y los golpeo repetidamente contra el  suelo, es cuando me oigo gritar “¡JODER! ¡JODER! ¡JODER!” una y otra vez.  Mi voz clama: “¿DÓNDE TE HAS METIDO? ¡Se qué estás en alguna parte! ¡No sé qué es lo que quieres, pero quédate o márchate de una vez si no tienes nada que decirme!”.

Respiro un poco y retomo mi monólogo, gritando más que nunca: “¿CREES QUE TE NECESITO EH? ¡Siempre he estado perfectamente sin ti! ¡DEJA DE OCULTARTE O DÉJAME EN PAZ!”. Entonces rompe a llover, como única respuesta… Me levanto tambaleándome y me río de mi mismo, hasta que vuelvo a preguntarme ¿Por qué no respondes?

https://www.youtube.com/watch?v=76WJJ57YoG0

3 comentarios:

  1. Parace que al final acabamos necesitando aquello que ni tenemos...

    ResponderEliminar
  2. La respuesta la tienes que dar tú.
    Qué profunda yo eh! ¬¬'

    ResponderEliminar